¿Conoces la leyenda
de la flor del “no me olvides”?
Cuenta una leyenda que Dios hizo el mundo en siete días.
No es cierto.
Dios hizo el mundo en un solo día y los seis restantes los dedicó a poner nombres a las cosas.
Tu serás árbol, tu serás nube, tu serás aire, tu serás tierra, tu serás pájaro, tu serás roca, tu serás casa, tu serás….
Al septimo día Dios regresaba cansado a casa y al cruzar su jardín escuchó una voz muy débil que le suplicaba…”no me olvides” “no me olvides” "no me olvides"
Como estaba tan cansado no pudo evitar enfadarse y pisotearla mientras gritaba: “Cuando dije yo que las flores pueden hablar, ingrata”.
Pero Dios tenía conciencia. A la mañana siguiente mirando por la ventana de su jardín recordó lo sucedido, y levantando una mano derramó sobre la hierba una pequeña flor, hecha del color azul del cielo y de una gota de su sangre arrepentida.
Entonces Dios dijo:
Pequeña, serás el único ser de la creación que podrá ser nombrado como quieras, la única entre todas mis criaturas que acompañaras a los vivos cuando quieran fijarse en ti, y a los muertos cuando nadie recuerde su tumba. Dime entonces…¿Cómo quieres llamarte?.
Y la humilde flor le respondió…
“no me olvides, no me olvides, no me olvides”