Cuando viva en la otra tierra, no sembraré palabra en mi huerto, lo llenaré de ilusiones y de valor. Quizá alguien como tú me dedique un verso, donde se cuente que viví pensando en lo que debo hacer mañana, sin saber lo que soy y lo que no me he amado. Me gustaría, claro que me gustaría
Esta es la Inocencia Montes que me seduce, la que no tiene reparos en someterse a todas las traslaciones del amor y escribirlo con arrestos.
En un momento de las relaciones en el que se expresan los sentimientos con torpeza, sale la Inocencia más perturbadora y dice sentirse como todos los perros posibles, le pone palabras a lo que los demás ocultamos y se deja morir en el último verso del poema sin perder el decoro y sin ruborizarse por sentir de esa manera. Enhorabuena por el valor, y gracias por el momento regalado.
Cuando viva en la otra tierra, no sembraré palabra en mi huerto, lo llenaré de ilusiones y de valor. Quizá alguien como tú me dedique un verso, donde se cuente que viví pensando en lo que debo hacer mañana, sin saber lo que soy y lo que no me he amado. Me gustaría, claro que me gustaría
ResponderEliminarQue desgarrador.....
ResponderEliminarEsta es la Inocencia Montes que me seduce, la que no tiene reparos en someterse a todas las traslaciones del amor y escribirlo con arrestos.
ResponderEliminarEn un momento de las relaciones en el que se expresan los sentimientos con torpeza, sale la Inocencia más perturbadora y dice sentirse como todos los perros posibles, le pone palabras a lo que los demás ocultamos y se deja morir en el último verso del poema sin perder el decoro y sin ruborizarse por sentir de esa manera.
Enhorabuena por el valor, y gracias por el momento regalado.
Un beso desde Cordoba. Julian