11 ago 2010

Me faltas tu

Vengo de una raza orgullosa y lego una estirpe inexistente. Siempre la misma pregunta. ¿Para qué vine…? ¿Para quién?
Yo bajé a la mazmorra con el Conde de Montecristo. Me agarré a las alas de Icaro hasta la última gota de cera.
Yo, volví con Ulises a Itaca a exterminar a los Procios.
Y crucé los ríos de Africa buscando a Livingstone; bien sujeta a la falda de la señora Weldon
Enloquecí en Macondo con las mariposas amarillas de Mauricio Babilonia
Me colé en las profundidades del corazón de Tagore, de Byron, de Kalil Gibran
Todo me parecía poco. Todo
Ahora, después de tanta imaginación en mi vida, sólo quedan maldiciones.
Maldecir el amor entre los malditos por hacerme desperdiciar mi vida buscando sus migajas en mesas de vasallos en vez de banquetes de señores.
Maldecir a Cupido por no tener más flechas. Por dejarme vacía y neurótica esperando una cadena que me arrastrara del cuello hasta la puerta de su corazón y arrojarme como esclava a sus pies, con la esperanza de ser nuevamente sometida.
Maldecir la vela que no tripuló bien mis vientos, que no sujetó mi mente a la tierra con un ancla grande.
Maldecir las súplicas que callé por orgullo, y los perdones que no pedí.
Maldecir los cuerpos que añoré porqué no me dejaron disfrutar del que tenía.
Malditos todos por dejarme soñar a todas horas. Malditos hasta los sueños por insinuarme perfumes cada mañana sobre las sabanas... rotas ya del corazón.

Pero sobre todo he de maldecir, el castigo de lágrimas al que me arrojaste sin piedad, el que me hinchó los ojos hasta cegarme completamente.
Aquel del que sólo pudo rescatarme mi alma, llevándome de la mano a una orilla segura donde me dejó en los brazos acogedores de amigos buenos, para volver a irse…caminando ya tranquila.

3 comentarios:

  1. Para mi quisiera yo los brazos amigos que sostienen a esta golondrina. Publica por favor. Un saludo lejano. Julian

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  2. Nadie ha podido saber de tu sabor; nadie ha tenido el tiempo para dedicarte un poema; nadie ha tenido el valor de leer en tus ojos la belleza que rebosas, sabor a Rocío. Las zarzas de la vida, no tienen comunicación con lo que no esta al alcance de las mentes nimias. Es muy fácil soltar la soga que nos ahoga, sabes muy bien que la mía es una maroma, pero aún así, disfruto de aquellas personillas que quieren entrar en mi burbuja. Vuela libre, no rompas lo que te ha hecho ser SER, aunque te duela , forma parte inseparable de ti ... Cuando tengas un ratito en tu viaje, mira el mar, ahí estaré, amándote eternamente

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  3. Maestro Baena... me inclino ante vos como un humilde girasol ante la luz deslumbrante del sol cuando amanece. Gracias

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